Cuidado Corporal
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Nuestros antepasados han realizado ayunos intermitentes a lo largo de la historia, por lo que esa práctica está de alguna manera marcada en nuestro ADN. El organismo permanecía muchas horas sin alimentarse, a veces por la propia dificultad de conseguir alimentos, el rigor en el estilo de vida o por razones religiosas.
El ayuno intermitente (IF) es un patrón de alimentación que cobra cada día mayor importancia. Numerosos estudios, expertos en nutrición y publicaciones de renombre demuestran y defienden los beneficios de esta práctica tan ancestral para la salud.
Famosos como Hugh Jackman o Margot Robbie atribuyen sus increíbles físicos a esta simple estrategia, sin embargo, deberíamos desvincularla de todo lo que concierne a la “operación bikini”, si bien ayuda a mantener un peso saludable, esta práctica no se queda en lo meramente estético, sino que va más allá. El ayuno tiene grandes beneficios para tratar y prevenir muchas enfermedades crónicas. Más allá de estos beneficios, también puede promover una mayor claridad mental y concentración e incluso se ha demostrado, en algunos casos, que prolonga nuestra vida y su calidad.
El ayuno intermitente es un patrón de alimentación en el que se alternan períodos de alimentación y de ayuno. Hay una variedad de enfoques para el ayuno intermitente, desde unas pocas horas al día hasta saltarse comidas durante dos días a la semana; los estilos comúnmente conocidos son el 16/8 o el 5/ 2. El primero consiste en estar 16 h sin comer o lo que es lo mismo no comer nada después de la cena y saltarse el desayuno del día siguiente. El segundo implicaría ayunar dos días a la semana y comer cinco días de forma habitual.
Desde ayunar unas pocas horas al día hasta saltarse comidas dos días a la semana, el ayuno intermitente puede ser una manera fácil de mejorar la salud, mantener un peso saludable y regenerar el organismo.
A diferencia de las dietas prescritas que requieren que se siga un conjunto estricto de reglas con restricciones de calorías o limitaciones en determinados alimentos, el ayuno intermitente te permite dictar cuándo y qué comer en un período de tiempo, y luego ayunar cuando el período termine. De hecho, es algo que hacemos cada noche mientras dormimos sin ser conscientes de ello, y los beneficios aumentan cuando lo hacemos de forma consciente.
Nuestro organismo se compone de una serie de sistemas y órganos que necesitan recuperarse. Si comemos todo el día, al cuerpo no le da tiempo limpiarse, ni tampoco se restablecen los niveles de insulina. La insulina es la hormona que solicita a cada una de nuestras células la entrada de glucosa. Las mitocondrias necesitan esta glucosa para producir energía. En muchos casos, la ingesta alta de carbohidratos o los tentempiés constantes pueden conducir a niveles altos de glucosa en sangre, lo que significa que la insulina solicita continuamente la entrada de glucosa y llega un momento en el que las células se cierran. Esto se torna en un ciclo peligroso que aumenta la insulina y la glucosa en sangre, ya que la glucosa no puede ingresar a las células para su utilización. Esto da como resultado que el exceso de azúcar sea escoltado y almacenado como grasa.
La forma más fácil y segura de restablecer tanto la insulina como la glucosa y perder grasa corporal no deseada es liberar toda la glucosa almacenada mediante la práctica de ayunos intermitentes regulares. Nuestros cuerpos comienzan a quedarse sin reservas de glucógeno cuando nos quedamos sin comer durante un período de unas doce horas, adoptando un modo “quema grasa”.
El ayuno intermitente parece tener mucho sentido desde un punto de vista evolutivo y biológico, pero lo que es igualmente interesante son los estudios realizados por neurocientíficos y médicos antienvejecimiento.
Mark Mattson , Profesor de Neurociencia en la Universidad Johns Hopkins es un gran defensor de los diferentes tipos de ayuno intermitente. Ha publicado varios estudios y revisiones que han mostrado una mejora en los marcadores biológicos ante enfermedades, la reducción del estrés oxidativo y la mejora de la función cognitiva. Mattson explica que estos hallazgos tienen mucho que ver con cómo el ayuno intermitente ayuda a aumentar la resistencia al estrés y a combatir la inflamación a nivel celular. “Las personas experimentan un cambio metabólico en el que se agotan las reservas de energía del hígado y, por lo tanto, las células del cuerpo comienzan a utilizar grasas y cetonas para obtener energía”, explica. Ya sea actividad física o ayuno, estos ciclos de desafío, recuperación, desafío, recuperación parecen optimizar tanto la función como la durabilidad de la mayoría de las células.
Valter Longo, Director del Instituto de Longevidad de la Universidad del Sur de California, inicialmente estudió el ayuno en ratones y demostró que cuando estaban de 2 a 5 días sin comer cada mes reducían los biomarcadores de diabetes, cáncer y enfermedades cardíacas. Desde entonces, la investigación se ha ampliado a personas y los científicos vieron una reducción similar en los factores de riesgo de enfermedad.
El Dr. Longo y Mattson están de acuerdo en que una de las razones clave por las que existe tal mejora en los biomarcadores clave se debe al efecto que tiene el ayuno en la reducción de la insulina y otra hormona llamada factor de crecimiento similar a la insulina, o IGF-1, que está relacionada con el cáncer y la diabetes. Reducir estas hormonas puede retrasar el crecimiento y el desarrollo celular, lo que a su vez ayuda a retrasar el proceso de envejecimiento y reduce los factores de riesgo de enfermedades.
Otra razón por la que los ayunos breves pueden mejorar la salud en general es a través de la activación de la capacidad del cuerpo para extraer energía de sus propias reservas de grasa. El Dr. David Ludwig, Profesor de Nutrición en la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, explica que al cuerpo le resulta más natural usar glucosa como combustible que grasa. Esto crea un metabolismo mucho más flexible y podría decirse que estamos diseñados fisiológicamente así.
Para quemar grasas tenemos que eliminar nuestro depósito de glucosa, lo que sólo puede suceder cuando llevamos sin comer un mínimo de diez horas. La grasa es una fuente limpia de energía, también ofrece una combustión más lenta, de ahí el aumento en los niveles de energía que las personas experimentan cuando participan regularmente en ayunos intermitentes. Durante este proceso, el hígado convierte la grasa en compuestos conocidos como cetonas, una gran fuente de energía que se quema de forma más eficiente que la glucosa. El Dr. Ludwig describe este proceso fisiológico como funcionamiento con “gasolina de alto octanaje”.
SALUD CEREBRAL: Los estudios han demostrado una mejora en la memoria, la cognición y la claridad. Se produce un aumento del BDNF (factor neurotrópico derivado del cerebro) durante el ayuno, que es la proteína que promueve el crecimiento y la protección de las neuronas, haciéndonos más resistentes al estrés neurológico y, por lo tanto, nos protege de enfermedades neurodegenerativas.
SALUD METABÓLICA: También hay varios beneficios metabólicos, tales como ayudar en la caída de los niveles de insulina en sangre, lo que a su vez facilita la quema de grasa, la pérdida de peso y la reducción de los niveles de azúcar en sangre . El ayuno a corto plazo también puede aumentar la tasa metabólica entre un 3,6% y un 14%, lo que le ayuda a quemar aún más calorías.
SALUD CARDÍACA: Se puede observar una mejora en la salud cardiovascular cuando se practica el ayuno intermitente debido a una mejora en biomarcadores clave como presión arterial, colesterol, triglicéridos en sangre, marcadores inflamatorios y niveles de azúcar en sangre.
ANTIEDAD: La inflamación juega un papel clave en el envejecimiento ya que daña las mitocondrias y aumenta la disfunción mitocondrial. Uno de los beneficios clave del ayuno intermitente es la reducción del estrés oxidativo y la inflamación al inducir importantes procesos de reparación celular y al eliminar el material de desecho de las células.
SISTEMA INMUNOLÓGICO: Está demostrado que el Sistema Inmunológico se refuerza en el momento en el que limpiamos las toxinas del organismo, además de verse reforzado cuando fortalecemos la flora intestinal a lo que ayuda muchísimo este sistema.
PROAGING: la Autofagia activa la Hormona del crecimiento (GH), que ayuda en gran medida a regenerar el cuerpo.
El estilo de vida actual nos lleva a ser sedentarios y a mantener hábitos que juegan en contra de nuestra salud. Ante ello, el ejercicio y la alimentación sana, y sobre todo, no tomarnos la alimentación ni el ayuno como una dieta para perder peso porque así nunca la integraremos como un hábito más de una vida saludable.
¿Influye nuestra salud intestinal a nuestra salud mental?
La relación es directa. Gran parte de las hormonas del bienestar, de la concentración y del poder descansar bien se fabrican en el intestino. Tenerlo en unas condiciones idóneas es básico para tu salud emocional y neuronal. Esta afirmación está más que demostrada científicamente.
¿Cómo se establece este vínculo?
Muchas personas con salud mental delicada, también tienen una salud intestinal débil. Como todos sabemos, el miedo, la ansiedad o el nerviosismo lo notamos en nuestro aparato digestivo y su funcionamiento de inmediato. La salud digestiva está vinculada con tu salud nerviosa. Estamos viendo como muchas personas con depresión y enfermedades del sistema nervioso tienen una salud intestinal débil y afectada. Ahora, la medicina integrativa empieza a trabajar las depresiones regulando la microbiota intestinal con determinados probióticos.
Te recomendamos el programa AP-GO, en el que Natalia de la Vega (fundadora de TACHA) participa e imparte una masterclass.
Se trata de un Ayuno prolongado: Un Programa Guiado de 10 días, paso a paso, que puedes hacer desde tu casa con toda comodidad.
Con material descargable, acceso a mentorías grupales y clases en directo, soporte intensivo, 3 días de pre-ayuno, 3 días de ayuno, 4 días de post-ayuno.
Además formarás parte de un grupo privado virtual para que estés acompañado en todo momento y lo harás desde la comodidad de tu casa.
Próxima edición: Febrero de 2021
– Limpia tu exterior
– Expulsa las toxinas de tu cuerpo.
– Regenera todo tu organismo.
– Desinflama tu cuerpo
– Mejora tu equilibrio hormonal.
– Gana en longevidad.
– Controla tu peso.
– Mejora tu aparato digestivo.
– Aumenta tu energía.
– Ayuda a reprogramar tu organismo para quemar grasas.
– Detectar posibles patrones de alimentación dañinos.
– Optimiza el funcionamiento de tu cuerpo.
Un ayuno prolongado de este tipo debe estar supervisado por un profesional especialista. Y especialmente si es la primera vez que lo haces. Así que si estás pensando en probar esta práctica, hazlo de forma controlada y con un método seguro y probado. No juegues con tu salud y ponte en manos de los mejores para descubrir los beneficios del ayuno.
El té tiene infinitas propiedades, muy recomendables para el proceso de ayuno intermitente. Aporta vitaminas, enzimas y antioxidantes con propiedades diuréticas, depurativas y calmantes. Hay una gran variedad de infusiones que pueden mejorar tu bienestar físico y mental para afrontar el proceso.
Teatox es una combinación de hierbas totalmente naturales que ayudan a depurar el organismo en su conjunto. En Tacha tenemos varios tipos, cada uno de ellos responden a una necesidad:
El “Método Brave” resuelve muchos de los problemas asociados con el ayuno intermitente, ya que en el momento que nos sintamos hambrientos y estresados al pasar más de 12 horas sin comer, podemos tomar Ancient + Brave. Además, si no estamos acostumbrados a ayunar 12 horas durante la noche, tenemos una dieta alta en carbohidratos o si experimentamos regularmente desequilibrios de azúcar en la sangre, nos costaría un poco más habituarnos y Ancient+Brave puede ayudarnos en ese período de adaptación.
El método Brave recomienda una ingesta matutina de una de las mezclas de Ancient + Brave; ya sea Café, Colágeno o Cacao + Colágeno , mezclado con True MCT. También puedes tomar sobres de Colágeno True Collagen Sachet.
Esta deliciosa bebida matutina está diseñada para apoyar el proceso de quema de grasa, mejorar el rendimiento físico y mental, al tiempo que le indica al cerebro que se sienta saciado y satisface la sensación de ansiedad por comer o hambre.
La forma más factible de practicar este estilo de ayuno intermitente es trasponer tus horas de ayuno durante la noche; por ejemplo, si comes tu última comida a las 7 pm, normalmente puedes volver a comer entre las 9 am y las 11 am del día siguiente. Mientras tanto, puedes tomar Ancient + Brave. Este uso equilibrado durante la noche en los períodos de ayuno de 14 a 16 horas practicado de tres a siete días a la semana, mientras que incorporas una deliciosa infusión para quemar grasa, rica en nutrientes, te ayudará a recuperar el control del azúcar en la sangre y te proporcionará una energía más equilibrada, evitando así los antojos.
Los beneficios del ayuno intermitente se activan mediante mecanismos clave, como la autofagia (la eliminación y el reciclaje de células muertas viejas) y la cetosis (que permite que el cuerpo se alimente de grasas en lugar de azúcar). Estos procesos biológicos no se interrumpen con el consumo de Ancient + Brave. Esto se debe al hecho de que la mayoría de las calorías que consumimos se encuentran en forma de grasas de cadena media presentes en MCT, lo que en realidad aumenta la producción de cetonas, mientras que las cantidades muy pequeñas de aminoácidos que se encuentran en nuestro colágeno alimentado con pasto, y cantidades minúsculas de carbohidratos tanto en el cacao como en el café, no alteran los niveles de cetonas ni disminuyen la autofagia, y te ayudarán nutricionalmente.
Por lo tanto, la potente combinación sinérgica de Café o Cacao, True MCT y los aminoácidos clave que se encuentran en True Collagen redefinen el ayuno intermitente al prevenir una respuesta de estrés no saludable, ayudar a quemar grasa y mantener el organismo saciado.
Si bien el ayuno es apropiado para casi todos los adultos, existen excepciones o precauciones a tomar. Las mujeres embarazadas y los niños deben evitar el ayuno de 12 a 14 horas, pues sus cuerpos están modo crecimiento. Cualquier persona que sufra problemas de alteraciones del ritmo cardíaco, agotamiento suprarrenal o hipoglucemia severa, tampoco debe ayunar durante más de 12 h.
La ciencia ha demostrado que el ayuno es un método beneficioso para contrarrestar enfermedades diabéticas. Sin embargo, cualquier persona que sea prediabética o diabética tipo 2 debe consultar primero a un profesional de la salud si está interesada en embarcarse en algún tipo de protocolo de ayuno intermitente.
– El ayuno intermitente no es un concepto nuevo. Debemos adaptarnos a nuestras necesidades, sería ideal hacer un ayuno más largo si hemos pasado por un período de excesos, o uno más corto si simplemente necesitamos regular el cuerpo.
– El ayuno intermitente es una estrategia de estilo de vida simple y eficaz que muestra beneficios para la salud del cerebro, el metabolismo y la longevidad.
– El Método Brave es una forma nutritiva de ayuno intermitente que facilita a sobrellevar los efectos psicológicos y fisiológicos cuando empezamos a practicar el ayuno.
Sin duda, el ayuno intermitente tiene múltiples beneficios para tu organismo y tu estado emocional. Eso sí, es fundamental que esté supervisado por un especialista, especialmente la primera vez. De este modo aprenderás a hacerlo de forma saludable, ya que no todo sirve en el ayuno.
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